martes, 21 de octubre de 2008

Una tarde en Otoño

Ella lo miró firmemente a los ojos, respiró profundo y decidió decírselo.

- Cuando morí decidí tres cosas:
1. No me reproduciría.
2. No sería borracha.
3. No creería en el amor.

Y en su mente se propagó: ¿algo más que quieras saber?

Realmente sí, pensó que respondería él. Pero permaneció en silencio hasta desfallecer.

1 comentario:

AniLoRaC dijo...

Me gusta, aunque esté lleno de melancolía.